Si a estas alturas del proceso me preguntaran quién creo que ganará las elecciones locales del primer domingo de julio, sin duda respondería que la coalición del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas denominada Puebla Unida conformada por el PAN, PRD, Panal y Compromiso por Puebla.

Varias son las razones que me hacen pensar lo anterior. La primera y no menos importante es que el árbitro de esta contienda -el Instituto Electoral del Estado y el Tribunal Electoral del Estado- es parcial, es decir, está cargado hacia una de las alianzas participantes.

De los nueve consejeros del Consejo General del IEE, al menos cinco son afines al gobernador Moreno Valle, y de los tres magistrados del TEE, dos responden a sus intereses.

En otras palabras los priístas y sus aliados del PVEM tienen perdida la mesa. De ahí que el Instituto se haga como que la virgen le habla ante las notables evidencias de violaciones al artículo 200 bis del Código Electoral por actos anticipados de campaña y frente a los excesivos gastos en que incurrieron los hoy candidatos de la coalición morenovallista con el inequívoco propósito de posicionarse entre los votantes.

Y de ahí también el resolutivo del TEE que obliga al PRI y al PVEM a buscarle otra denominación a su alianza y a sustituir sus spots de radio y televisión suscritos como Mover a Puebla.

Una segunda razón tiene que ver con las fracturas que se han dado en el proceso interno de selección de candidatos del PRI, como consecuencia de la imposición de fórmulas de candidatos a diputados al Congreso del estado y de planillas de regidores y síndico en decenas de municipios de la entidad, la falta de acuerdos entre los grupos priístas en disputa y la marginación de que han sido objeto los dirigentes de estos grupos por el delegado del CEN, Fernando Moreno Peña, y el delegado presidente del CDE, Pablo Fernández del Campo Espinosa.

En este contexto hay que leer las críticas que este lunes lanzó Javier López Zavala al delegado del CEN y al presidente del CDE del PRI, y la carta que 11 de los 14 diputados federales de Puebla enviaron a su secretaria general nacional, Ivonne Ortega Pacheco, advirtiéndole de la virtual derrota electoral que están por sufrir el próximo 7 de julio.

La ausencia de una operación política eficaz para zanjar diferencias o procesar los conflictos internos, con el propósito de evitar deserciones o que los precandidatos o grupos inconformes  priístas abandonen las filas del tricolor para adherirse o ser candidatos de la coalición morenovallista, es otra razón que me lleva a pensar en la derrota del PRI.

Los priístas que en esta contienda han roto o abandonado su partido para sudar la camiseta de la coalición Puebla Unida no son pocos.  Ahí están, sólo por citar algunos ejemplos, los casos de Puebla, San Pedro Cholula, Huejotzingo, Zacatlán o Amozoc.

Mientras el gobernador Moreno Valle personalmente ha encabezado la operación cicatriz al seno de los partidos integrantes de la coalición Puebla Unida, el delegado del CEN y el presidente del CDE del PRI no sólo han minimizado las protestas de los grupos inconformes de su partido, sino vilipendiado a quienes se convirtieron en abanderados de la oposición después de que el tricolor les negó esta posibilidad, pese a ser los más populares o los mejor posicionados en sus municipios y distritos.

El diputado federal descalifica el proceso interno del PRI

El CEN del PAN avala registro de José Antonio Gali Fayad

¿Qué será peor, la exclusión o la imposición?

La pregunta viene a cuento por lo que manifestó este domingo el candidato del PRI a la presidencia municipal de Puebla, Enrique Agüera Ibáñez, durante su discurso de toma de posesión, y por las críticas que el diputado federal Enrique Doger Guerrero lanzó en contra del delegado del CEN priísta, Fernando Moreno Peña, respecto al desaseado proceso de selección de candidatos a presidentes municipales y diputados al Congreso del estado.

Del mensaje de Enrique Agüera llaman la atención algunas frases que revelan la posición que asumirá como candidato opositor, y el necesario contraste que tendrá que marcar entre el gobierno municipal, que pretende encabezar, y el estilo personal de gobernar del ejecutivo estatal.

“Escucho también de la gente su preocupación por la exclusión, por la forma en que se ignora aquello que la sociedad reclama y desea. No se puede gobernar sin escuchar a las personas, sin dialogar, sin identificar lo que los distintos sectores demandan…”.

“Nosotros vamos a construir una propuesta absoluta y totalmente incluyente. Vamos a construir una Puebla en la que quepamos absolutamente todos”.

Un par de horas antes de que Enrique Agüera rindiera protesta como candidato a la presidencia municipal de Puebla, su rival en la contienda priísta, el diputado federal Enrique Doger, desacreditó el proceso interno del tricolor y al principal operador de éste: Fernando Moreno Peña, delegado del CEN del PRI.

Sobre el método de selección de candidatos, Doger escribió en su cuenta de Twitter: “Hoy formalmente el PRI poblano completa un proceso marcado por la imposición en algunos casos de candidaturas, que dividen al Partido”. Y para no dejar dudas sobre el destinatario de sus críticas agregó: “Las recetas de Colima impuestas al PRI poblano presagian resultados adversos el próx 7 de Julio, por el desconocimiento y la arbitrariedad” y “A los aprendices de Colima poco les importan los poblanos regresarán a su tierra, después de sembrar el encono, la división y la derrota”.

La rabieta del diputado Doger no es extraña ni casual. Ya se esperaba. Sólo que se dio en el peor momento para el PRI y su candidato a la alcaldía capitalina que, se supone, ya había concertado con aquél algunos acuerdos que no se cumplieron o no se respetaron.

Esta situación pone al descubierto una cuestión que los dirigentes priístas han pretendido minimizar en aras de justificar la imposición de ciertos candidatos a presidentes municipales y diputados al Congreso del estado: que tales fracturas o divisiones podrían hacer la diferencia entre ganar o perder algunos municipios y distritos.

Y algo todavía más importante: que en estas elecciones el PRI no sólo compite contra los candidatos del gobernador Moreno Valle nominados por la coalición Puebla Unida, sino contra sí mismo, encarando las traiciones de sus cuadros y militantes quienes, al no obtener las candidaturas que buscaban, optan por irse a la oposición o por mantenerse dentro del PRI pero en funciones de quintascolumnas.

De ahí la pregunta inicial de esta columna: ¿Qué será peor, la exclusión o la imposición?

EN CORTO

Esta noche, el Comité Ejecutivo Nacional del PAN, a través de la Comisión Nacional de Elecciones, podría dar por bueno el registro de José Antonio Gali Fayad como candidato a la presidencia municipal de Puebla, dejar fuera al otro aspirante (Francisco Javier Torres Sánchez “El Bony”) y desechar la impugnación promovida por Violeta Lagunes Viveros en contra del proceso interno de selección de candidatos del blanquiazul.

Por cierto. Me cuentan que varios son los interlocutores que se ofrecieron como intermediarios para convencer a El Bony o Violeta Lagunes para que se bajaran de la contienda interna o se desistieran de su impugnación, entre ellos el ex delegado del INAH en Puebla, José Francisco Miguel Rivas García, que se dice amigo de Torres Sánchez, y el diputado panista con licencia Jesús Zaldívar Benavides.

Sobre este último dicen que buscó a la ex delegada de la Secretaría del Trabajo por petición del coordinador de campaña de Gali Fayad, Fernando Manzanilla Prieto.

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El delegado de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), Juan José Tapia González, ya por fin comenzó a meter a su gente de Hidalgo en algunas plazas de este organismo descentralizado.

Aunque para ello, tuvo que dar de baja o despedir a cuatro empleados, entre ellos Adrián Cortés Escobar, Eulalia González Mora y Eloy Flores Morales, que tenían sueldos de 10 mil pesos mensuales y estaban adscritos a áreas operativas.

Con la baja de estas tres personas de oficinas centrales de la CDI de Puebla y una de albergues escolares del interior del estado, el delegado Juan José Tapia nombrará a un paisano suyo en un puesto directivo, asignándole un sueldo de más de 20 mil pesos más compensaciones, chofer, secretaria, vehículo, teléfono celular y vales de gasolina.

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Ley 10 (de Las 48 Leyes del Poder de Roberto Greene)

PELIGRO DE CONTAGIO: EVITE A LOS PERDEDORES Y A LOS DESDICHADOS

“La desdicha de los demás puede conducirlo a la muerte: los estados de ánimo son tan contagiosos y tóxicos como una enfermedad infecciosa. Aunque sienta que debe tenderle una mano a alguien que se está hundiendo, lo único que logrará con ello será acelerar su propia caída. A menudo, los perdedores son los artífices de su propia desgracia y terminan por transmitirla a quien quiere ayudarlos. Evítelos y, en cambio, frecuente individuos ganadores y felices”.

Jaime Alcántara Silva está lejos de ser un coordinador ideal de campaña, al menos para el ex rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, quien contenderá como candidato a la alcaldía poblana por la coalición Mover a Puebla, integrada por el PRI y el PVEM.

Para la cerrada y dura competencia que se espera, el priísta Jaime Alcántara parece un dulce, un caramelo, frente al grupo del gobernador Rafael Moreno Valle y el PAN.

Y para comprobarlo sólo hay que investigar dónde ha trabajado su esposa María Elena Torres Machorro en los últimos años y quién del gobierno morenovallista la ha recomendado y promovido en sus últimos tres empleos:

Juez del Segundo Juzgado Registro Civil, de junio a diciembre de 2011; directora del Registro del Estado Civil, del 15 de diciembre de 2011 al 16 de julio de 2012; y Directora de Asistencia Jurídica del Sistema DIF estatal, de julio de 2012 a la fecha.

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Juan Manuel Alonso Orozco, mejor conocido en los beneméritos corrillos universitarios como El Osito, está por renunciar o pedir licencia en la Universidad Autónoma de Puebla, donde se desempeña como director de Desarrollo e Integración Estudiantil, para integrarse al equipo de campaña de Enrique Agüera.

Los enterados aseguran que Juan Manuel Alonso será nombrado subcoordinador de campaña y que trabajará muy de la mano con Víctor Manuel Giorgana Jiménez, quien será nombrado coordinador operativo del candidato de la coalición Mover a Puebla a la presidencia municipal de la capital.

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El ex rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, ya cuenta con los servicios del consultor Juan Carlos Limón y su agencia By Power, que se encargará de diseñar y manejar su imagen de campaña como candidato a la presidencia municipal de Puebla por recomendación del secretario de Gobernación federal, Miguel Ángel Osorio Chong, y del presidente del CEN del PRI, César Camacho Quiroz.

En el cuartel de José Antonio Gali Fayad, por su parte, ya contrataron a José Carlos Mandujano Fernández, de Cuarto de Guerra, que es un especialista en campañas de contraste o polarización.

Ambos personajes participaron, por cierto, en la campaña de Javier López Zavala a la gubernatura de Puebla en 2010, por recomendación del ex director de Comunicación Social de Mario Marín Torres, Javier Sánchez Galicia. 

Con el ex rector de la BUAP están también Javier Sánchez Galicia, a través del Instituto de Comunicación Política, y Antonio González Luna, como asesor en cuestiones de imágenes y producción de spots de campaña.

Y en el cuarto de guerra de José Antonio Gali están, además de Mandujano Fernández, la consultora y mercadóloga Gisela Rubach Lueters, el director de Parametría, Francisco Abundis, y Marcelo García Almaguer.

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Ley 43 (de Las 48 Leyes del Poder de Robert Greene)

TRABAJE SOBRE EL CORAZÓN Y LA MENTE DE LOS DEMÁS

“La coerción provoca una reacción que, con el tiempo, puede actuar contra usted. Es necesario lograr, mediante maniobras de seducción, que los demás se muevan en la dirección que usted desea. Una vez seducida, la persona se convierte en leal servidor. Y la forma más eficaz de seducir a alguien, consiste en manejar con habilidad las flaquezas y la psicología del individuo. Debilite la resistencia del otro a través de la manipulación de las emociones, jugando con lo que el otro ama y valora, o lo que teme. Si usted ignora el corazón y la mente de los demás, terminarán odiándolo”.

En el municipio de Puebla el PAN aventaja al PRI

José Chedraui se fue de vacaciones con su familia

Varias son las razones por cuales al final el Comité  Ejecutivo Nacional del PRI se inclinó a favor del ex rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, y no por el empresario José Chedraui Budib, como su candidato a la presidencia municipal de Puebla.

La primera y más importante es que Agüera es hoy por hoy el contendiente a la alcaldía poblana más competitivo, incluso por encima de José Antonio Gali Fayad, el inminente candidato de la coalición Puebla Unida conformada por el PAN, el PRD, el Panal y el partido estatal Compromiso por Puebla.

El PRI se decidió, pues, por el aspirante de mayor rentabilidad electoral, según diversas encuestas.

Uno de los factores que el CEN del PRI más ponderó en su análisis fueron los llamados votos negativos de sus precandidatos. Y este punto fue determinante para dejar fuera de la puja final al diputado federal Enrique Doger Guerrero, quien a pesar de ser el más conocido de los priístas, era el que concentraba el grueso de los votos de rechazo o de castigo.

Este componente, en cambio, era una de las mayores fortalezas del empresario José Chedraui. Sus negativos eran relativamente muy bajos como consecuencia de su corta trayectoria política y no haber ocupado cargos de elección popular o de representación pública a sus 44 años de edad.

Agüera Ibáñez sí tiene votos negativos, pero no tantos como Enrique Doger, debido a que sus operadores y estrategas de medios y marketing han sabido asociar su imagen personal con la de la máxima casa de estudios de la entidad, sacándole el mayor provecho posible y amortiguando el impacto negativo de algunas campañas negras lanzadas en su contra en las redes sociales.

Si las gestiones de control de daños emprendidas por Agüera y sus operadores para contener la guerra sucia hubieran fracasado, sus negativos hoy seguramente estarían al alza, y otro sería el candidato de la coalición Mover a Puebla —formada por el PRI y el PVEM— a la alcaldía capitalina.

Otra razón acerca del por qué Agüera y no Chedraui fue el elegido para encabezar la planilla de regidores y síndico del municipio de Puebla fue la conformación de la alianza opositora Puebla Unida.

Frente a este bloque integrado por el PAN, el PRD, el Panal y Compromiso por Puebla, el PRI necesitaba no sólo un candidato altamente competitivo, sino que además pudiera influir en otros partidos para neutralizar a sus dirigentes y candidatos, o para convertirlos de facto en aliados suyos aunque no vayan en coalición.

Como rector de la BUAP Agüera construyó alianzas con diferentes partidos y en no pocos casos hasta ayudó a ciertos dirigentes y candidatos que hoy están sumados a la coalición Puebla Unida, o que en este proceso electoral van solos, como el PT y Movimiento Ciudadano.

Esta situación podría contribuir a que las críticas de los candidatos y dirigentes de la coalición Puebla Unida hacia su persona y trayectoria se matizaran o que el discurso y las propuestas de los candidatos del PT y Movimiento Ciudadano se enfocaran a debilitar a su contrincante José Antonio Gali y no a él.

Un elemento adicional que explica la nominación de Agüera es que el empresario amigo del presidente Enrique Peña Nieto no creció lo suficiente. Si bien José Chedraui logró ser conocido por casi el 30% de los electores del municipio de Puebla, lo cierto es que su posicionamiento y potencial de voto siempre estuvieron por debajo del secretario de Infraestructura del estado, José Antonio Gali.

En los ejercicios demoscópicos que se hicieron entre los electores de la capital preguntando por quién votaría para la presidencia municipal de Puebla si los candidatos fueran José Chedraui y José Antonio Gali, el ex coordinador estatal del comité de financiamiento de la campaña de Enrique Peña Nieto nunca superó a su eventual contrincante del PAN.

El único priísta que en estas encuestas le ganaba a José Antonio Gali era el rector de la BUAP.

Sin embargo, en la intención de voto por partido, el PAN va a la cabeza en las preferencias electorales, y en alianza con el PRD, el Panal y Compromiso por Puebla su ventaja se amplía a casi 10 puntos, aun siendo Enrique Agüera el candidato del PRI a la presidencia municipal de Puebla.

EN CORTO

Después de enterarse de que no sería el elegido del PRI a la presidencia municipal de Puebla y felicitar en Twitter a Enrique Agüera por su próxima nominación, el empresario José Chedraui Budib se fue de vacaciones.

Los enterados aseguran que este domingo tomó un avión para alcanzar a su familia en una paradisiaca playa para relajarse y aprovechar las vacaciones de Semana Santa.

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Simón dice:

“Es imposible ganar sin que otro pierda.”

Publio Siro (Siglo I AC-?) Poeta dramático romano.

Uno podría ir a la alcaldía y el otro al Congreso del estado

Definirá Consejo Nacional perredista alianza con el PAN

Ahora que el PAN ya definió de manera interna que José Antonio Gali Fayad sea su candidato a la presidencia municipal de Puebla —lo que se hará oficial en los próximos días—, la pregunta más recurrente en los corrillos políticos de la capital del estado es quién será el abanderado del PRI.

Como aquí lo he señalado, en la puja final por la nominación del candidato del partido tricolor a la alcaldía poblana ya sólo quedan dos aspirantes: el rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, y el empresario José Chedraui Budib. Los restantes cuatro sólo son una cortina de humo.

A la pregunta: ¿quién de los dos será el designado?, debo responder con toda claridad que no tengo ninguna certeza, aunque sí la impresión de que ambos serán candidatos: uno a la presidencia municipal y otro a diputado local con el compromiso de la presidencia de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, siempre que el PRI gane la mayoría parlamentaria.

¿Quién será qué?

Tampoco lo sé, aunque tengo mis fundadas sospechas de que la decisión de la dirigencia nacional priísta de atrasar la nominación de su abanderado obedece a dos circunstancias. Una es dar oportunidad a que el empresario que coordinó en Puebla el comité de financiamiento de Enrique Peña Nieto siga creciendo en conocimiento e intención de voto, para acortar la ventaja que le saca el rector de la BUAP en las encuestas.

La segunda hipótesis es que la supuesta indecisión del PRI en realidad tiene que ver con una labor de persuasión hacia Enrique Agüera Ibáñez para que acepte ir como candidato a diputado, garantizándole incluso la primera posición en la lista de plurinominales así como la coordinación del grupo parlamentario o la presidencia del órgano de gobierno de la próxima legislatura.

Creo, con base en información de primera mano, que todavía se está en proceso de convencer a Enrique Agüera de renunciar a la BUAP para ser registrado como candidato al Congreso del estado y que esta situación, y no otra, es la verdadera causa de la dilación priísta.

Debo aclarar que lo anterior no significa que José Chedraui será el elegido. No. Lo que digo es que el empresario es el favorito de Los Pinos y de algunos actores del grupo gobernante.

Desde mi perspectiva, el segundo escenario también podría darse, pero a la inversa. Es decir, que Enrique Agüera presidiera la planilla de regidores y síndico de la coalición PRI-PVEM y José Chedraui fuera nominado a una diputación con la promesa de coordinar la bancada priísta en la LIX Legislatura del Congreso local.

De lo que sí estoy seguro es que el PRI no desaprovechará el trabajo de posicionamiento de ambos actores, dado el interés mostrado por recuperar el gobierno de la capital y la reñida competencia que se vislumbra con el PAN morenovallista y su candidato a la alcaldía, José Antonio Gali.

Entre los elementos que me llevan a plantear las circunstancias arriba planteadas destacan las siguientes:

Las recurrentes declaraciones tanto del delegado del CEN del PRI, Fernando Moreno Peña, como de la secretaria general Ivonne Ortega Pacheco, en el sentido de que el candidato de su partido no lo definirán las encuestas, pues no siempre los punteros en estos estudios demoscópicos son los que ganan las elecciones.

El insistente argumento de que el PRI no necesariamente se inclinará por el aspirante más conocido o más posicionado, sino por el que reúna el mejor perfil y garantice la mayor rentabilidad electoral.

La pertinaz tesis de que al PRI no le corre ninguna prisa, pues tiene hasta abril para registrar a su abanderado, amén de que hacerlo ahora anularía los efectos y consecuencias electorales del Elbazo en Puebla.

La confidencia del delegado del CEN, Fernando Moreno Peña, de que al candidato a la alcaldía no lo definirán los grupos locales, sino el presidente de la República y sus operadores políticos y electorales.

Y el hecho de que el empresario José Chedraui, lejos de ser reconvenido para que cese en su actividad proselitista, ha sido convocado, junto con el rector Enrique Agüera, a reunirse en privado lo mismo con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que con el presidente y la secretaria general del CEN del PRI, César Camacho Quiroz e Ivonne Ortega, respectivamente, para pedirles mantengan la unidad y eviten golpes bajos entre sí.

EN CORTO

Será en la sesión de Consejo Nacional del PRD, prevista para el próximo sábado 16 de los corrientes, cuando se defina finalmente si este partido hará o no alianza en Puebla con el PAN.

En principio existe un acuerdo entre el gobernador Rafael Moreno Valle y su candidato a la alcaldía poblana, José Antonio Gali, para que los perredistas de Nueva Izquierda se sumen a una coalición con el PAN.

Sin embargo, tal acuerdo se ha complicado por la negativa de dos corrientes que, aunque minoritarias, pueden igualar los votos de Los Chuchos: Izquierda Democrática Nacional (IDN), encabezada por René Bejarano Martínez y Alternativa Democrática Nacional (ADN) comandada por el senador Luis Sánchez Jiménez.

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Simón dice:

“Que siempre por señales o razones se suelen descubrir las intenciones.”

Alonso de Ercilla y Zúñiga (1533-1594) Escritor español.

El Comité Ejecutivo Nacional del PRI podría hacer oficial, en el transcurso de la próxima semana, el nombre de quien será su abanderado a la presidencia municipal de Puebla en los comicios locales de julio próximo. Y las opciones para la nominación son el rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, y el empresario José Chedraui Budib.

La intención de apresurar la designación es clara: no dar ninguna ventaja al inminente candidato del PAN a la alcaldía poblana, que no es otro más que el secretario de Infraestructura del estado, José Antonio Gali Fayad, cuyo conocimiento y posicionamiento entre los electores continúan a la alza.

En la reunión que la secretaria general del CEN del PRI, Ivonne Ortega Pacheco, sostuvo este miércoles con los seis aspirantes de su partido a la presidencia municipal de Puebla, éstos le plantearon la urgencia de acelerar el proceso de designación del candidato con la publicación de la convocatoria, incluso antes de la XXI Asamblea Nacional priísta.

Si dicho planteamiento procediera, y considerando que la Asamblea Nacional del PRI se efectuará del viernes 1 al domingo 3 de marzo, esto significa que la convocatoria tendría que salir a mediados de la próxima semana y que, antes de ello, la dirigencia nacional priísta tendría ya que haber tomado una decisión.

Decisión en la que, insisto, sólo hay dos opciones: el rector de la BUAP, Enrique Agüera, y el empresario José Chedraui, ex coordinador estatal de campaña de financiamiento de Enrique Peña Nieto.

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Un diputado que ya se promueve para asumir la coordinación del grupo parlamentario del PRI en el Congreso del estado, ahora que Edgar Salomón Escorza pida licencia para ir en busca de la presidencia municipal de San Martín Texmelucan, es Ernesto Leyva Córdova, mejor conocido por sus pares como Neto Chinantla.

A este legislador se le ubica como miembro del grupo zavalista. Fue electo diputado por el distrito de Acatlán, en la Mixteca poblana, después de que entre 2008 y 2010 fue presidente municipal de Chinantla. Actualmente es presidente de la Comisión de Salud y secretario de las comisiones de Migración y Asuntos Internacionales, y de Grupos Vulnerables.

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A propósito. Todo indica que la LVII Legislatura del Congreso del estado seguirá llenándose de suplentes ahora que arranquen los procesos internos de selección de candidatos a presidentes municipales en los diferentes partidos políticos.

A la lista de suplentes que hoy ocupan una curul en el Poder Legislativo podrían sumarse otros ocho, si en marzo piden licencia cinco priístas y tres panistas.

Entre los priístas figuran Edgar Salomón Escorza, Felipe David Espinoza Rodríguez, Eleofermes Palacios Reyes, David Edgardo Huerta Ruiz y Zenorina González Ortega, quienes aspiran a las alcaldías de San Martín Texmelucan, Chietla, Ajalpan, Tepeaca y Xicotepec de Juárez, respectivamente.

Entre los diputados panistas que también podrían dejar el Congreso local para ir en busca de una presidencia municipal están Inés Saturnino López Ponce, por Tecamachalco; Blas Jorge Garcilazo Alcántara, por Tlachichuca; y Edgar Antonio Vázquez Hernández, por Teziutlán.

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Simón dice:

“El que es elegido príncipe con el favor popular debe conservar al pueblo como amigo.”

Nicolás Maquiavelo (1469-1527) Historiador, político y teórico italiano.

El PAN, el partido de mayor intención de voto y menos rechazo

Cambian al equivalente de Manzanilla en la Curia Arzobispal

Pablo Fernández del Campo renueva por fin el CDE del PRI

De los aspirantes a la presidencia municipal de Puebla con más posibilidades, el rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, es el de mayor potencial de voto, seguido por el secretario de Infraestructura del estado, José Antonio Gali Fayad, de acuerdo con una encuesta realizada por el Centro de Estudios Consultivos los días 7 y 8 de enero.

El estudio demoscópico —aplicado a una muestra de 1,350 ciudadanos con credencial de elector del municipio de Puebla— reveló sin embargo que el PAN es el partido mejor evaluado y que incluso podría ganar las elecciones para la alcaldía capitalina sin necesidad de coaligarse con el PRD.

La encuesta del Centro de Estudios Consultivos que dirige Manuel Martínez Benítez arrojó que, si hoy fueran los comicios para presidente municipal, el PAN obtendría el 33.5% de la intención de voto, el PRI el 27.2% y el PRD el 11.5%, y que una alianza PAN-PRD-Panal captaría el 45.7% de los sufragios de los ciudadanos que salieran a votar contra el 27.4% de la coalición PRI-PVEM.

Un dato revelador del levantamiento es que en la capital del estado son más quienes rechazan una alianza del PAN con otros partidos (51.3%) que los que la apoyan (41.6%). Sin embargo, de estos últimos la mayoría piensa que el PRD sería el mejor aliado del PAN.

Para los ciudadanos radicados en la capital del estado y con intención de participar en los comicios de julio próximo, su mayor interés se centra en los precandidatos a la alcaldía de Puebla, y es aquí donde el rector de la BUAP lleva la delantera en potencial de voto.

De los aspirantes a suceder a Eduardo Rivera Pérez en el ayuntamiento de Puebla, el diputado federal Enrique Doger Guerrero es el más conocido (73.3%) pero de los que menos confianza generan entre los votantes. Enrique Agüera es el segundo más conocido (65%), seguido por José Antonio Gali (40.7%). Atrás de ellos aparecen la ex secretaria de Desarrollo Social, Ana Teresa Aranda (33.8%); el secretario General de Gobierno, Fernando Manzanilla Prieto (26.4%); el secretario de Salud, Jorge Aguilar Chedraui (26%); y el empresario José Chedraui Budib (19.6%).

De quienes dijeron conocer a los precandidatos, el rector de la BUAP es el de mayor potencial de voto entre los priístas (50.5%), luego el empresario José  Chedraui (38.6%) y finalmente el diputado federal Enrique Doger (32.4%). A este último lo perjudican sus negativos, pues tres cada siete ciudadanos que refieren conocerlo no le tienen confianza.

Entre los aspirantes panistas el secretario de Infraestructura del estado registra el mayor potencial de voto, seguido por la ex secretaria de Desarrollo Social en el gobierno foxista y el secretario General de Gobierno morenovallista. La ventaja de José Antonio Gali sobre Ana Teresa Aranda es de 7 puntos y sobre Fernando Manzanilla de 14 puntos, en potencial de voto.

El estudio demoscópico, patrocinado por el periódico digital e-consulta, fue levantado bajo un muestreo aleatorio, polietápico y probabilístico con base en las secciones electorales y las cuotas de género y edad; tiene un margen de error de más menos 2.6%.

EN CORTO

El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, nombró nuevo Vicario General en la Curia Arzobispal. Se trata de canónigo Hugo Corona Sánchez, quien sustituye en el cargo al presbítero Rafael Amador Tapia Zúñiga.

La Vicaría General es el equivalente a la Secretaría General de Gobierno, pues tiene como funciones la moderación de la Curia y la coordinación de los diferentes vicarios del gobierno de la Arquidiócesis.

El nombramiento de Hugo Sánchez se publicó en el último número de Angelus, el semanario oficial de la Arquidiócesis de Puebla, en el que también se publica una entrevista con él, en la cual afirma que su misión está regulada por el Código de Derecho Canónico, donde se establece su “principal función es ser el segundo del Arzobispo, ayudar en el gobierno de la Arquidiócesis, ser el que recibe, ser filtro de todas las situaciones difíciles que se vayan presentando antes de llegar al Señor Arzobispo”.

Víctor Sánchez instruyó al Vicario General hacerse cargo de las siguientes tareas: conceder o prorrogar toda clase de licencias ministeriales; conceder toda clase de dispensas matrimoniales conforme a las normas vigentes; tramitar dispensas e indultos ante la Sede Apostólica; ejecutar rescriptos, a no ser que se establezca otra cosa expresamente o se hayan tenido en consideración las cualidades personales del Obispo; conceder permisos para bautizar adultos; conceder a los sacerdotes el permiso de salir de vacaciones o de viaje; recibir comisiones de fieles, cuando así se requiera; resolver asuntos relativos a la disciplina eclesiástica; informarse acerca de los sacerdotes enfermos o necesitados para prestarles ayuda; visitar zonas donde haya algún conflicto o urgencia; asistir a algunos eventos como representante del Arzobispo; y conceder la licencia para el Sagrado Depósito.

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Para quienes ilusamente creían que nadie peor que Jorge Sánchez Morales podría llegar al Instituto Electoral del Estado (IEE), les tengo malas noticias. El nuevo consejero presidente del organismo está igual o peor que su antecesor en el tema de transparencia y rendición de cuentas. Mañana le platico los detalles.

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Aunque entre los integrantes del nuevo Comité Directivo Estatal del PRI hay poco que presumir, lo cierto es que los relevos anunciados este domingo por Pablo Fernández del Campo eran muy esperados ante las versiones de que la estructura priísta seguía en manos del anterior delegado presidente del partido, el polémico Fernando Morales Martínez.

Los cambios más importantes se dieron en las secretarías de Organización, Acción Electoral, Operación Política y Finanzas. De éstas salieron Miguel Ángel Ceballos López, José Alarcón Hernández, Víctor Huerta Morales y Ángeles Mendoza Escalante, respectivamente.

A estas carteras llega gente nueva identificada con Pablo Fernández del Campo, pero también vinculados a otros grupos priístas como Francisco Ayala Gutiérrez, ex operador electoral de la senadora Blanca Alcalá —quien fue nombrado al frente de la Secretaría de Organización—, y Carlos García Mendoza, ex director jurídico de Enrique Doger Guerrero en el ayuntamiento de Puebla, quien tendrá a su cargo la Secretaría de Asuntos Electorales.

Armando Ramírez Valderrábano, de filiación zavalista, asumió la Secretaría de Operación Política; y Gustavo Mena Porras, ex socio de Fernández del Campo, la Secretaría de Finanzas, que estaba a cargo de la hija del ex subsecretario de Administración de Mario Marín, Jorge Mendoza Velarde.

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Simón dice:

“Verdad es lo que la mayoría ve como verdad, pero la mayoría también puede cambiar de opinión a lo largo de la historia.”

Salman Rushdie (1947-?) Escritor anglo-hindú.

La amplia coalición opositora que el ahora gobernador, Rafael Moreno Valle, logró formar en 2010 para derrotar al PRI, difícilmente se repetirá en los comicios locales del próximo año.

Al menos uno de los partidos que lo apoyaron en 2010, Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) ya le dijo que en el proceso electoral de 2013 prefiere ir solo, es decir con candidatos propios en los 26 distritos y en la mayoría de los 217 municipios de la entidad.

Otro partido que en ese entonces no formó parte de la coalición Compromiso por Puebla, pero que el gobernador Moreno Valle ahora intentó sumar en una alianza con el PAN, el PRD y el Panal, es el PT.

Su dirigente nacional, Alberto Anaya Gutiérrez, ya declinó amablemente la invitación.

Con la dirigencia nacional del PRD existe un acuerdo inicial con la corriente de Los Chuchos, denominada Nueva Izquierda; sin embargo existen otros grupos, con presencia local, que no están de acuerdo en ir de la mano del gobernador Moreno Valle y del PAN en los próximos comicios.

Estos grupos, no mayoritarios dentro del PRD poblano, tampoco tienen una posición definida. Unos se inclinan por postular candidatos propios o en alianza con los demás partidos de izquierda. Otros, en cambio, se inclinan por la alianza siempre y cuando les garanticen regidurías y diputaciones plurinominales, es decir, posiciones seguras de cuatro años ocho meses en los siguientes ayuntamientos y el Congreso del estado.

Entre estos últimos perredistas se encuentran aquellos que más tarde que temprano abandonarán las filas del sol azteca para adherirse a la nueva organización comandada por Andrés Manuel López Obrador, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

Con el Panal se da como un hecho la coalición, dada la estrecha relación que mantiene el elbista mandatario estatal con la madrina política de este partido magisterial, Elba Esther Gordillo Morales.

Lo mismo sucede con el nobel partido estatal Compromiso por Puebla, cuyo origen, gestación y reconocimiento por parte del Instituto Electoral del Estado (IEE) no se explica sin el apoyo operativo y financiero que tuvo del gobernador Moreno Valle.

Así las cosas, lo más probable es que la nueva coalición del gobernador aliancista Moreno Valle tenga como integrantes al PAN, al PRD de Nueva Izquierda, al Panal y a Compromiso por Puebla, ya que el PT y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia ) irán, como lo informé líneas arriba, cada cual por su lado.

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La convocatoria al foro “Periodismo bajo amenaza. ¿Qué hacer para proteger la libertad de expresión?” ha sido tan bien recibida que algunos invitados a participar como ponentes y otros que inicialmente no estaban considerados, se han sumado y confirmado su asistencia.

Entre ellos el senador poblano y líder del grupo parlamentario del PRD en la Cámara Alta, Luis Miguel Barbosa Huerta, quien se integrará a la tercera mesa, que tiene como temática “El periodismo bajo amenaza: el crimen organizado y la censura”.

Otra figura que también acudirá al foro —cuya sede será el auditorio del Tec de Monterrey campus Puebla con entrada gratuita al público— es Antonio Mazzitelli, representante en México de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito.

Y el lunes es muy probable que confirme su asistencia Mike O’Connor, representante en México del Committee to Protect Journalists (CPJ).

El programa completo del foro puede consultarlo aquí.

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Muy interesantes los resultados de la última encuesta de Consulta Mitofsky sobre los aspirantes del PRI y el PAN a la presidencia municipal de Puebla.

Según la empresa de Roy Campos, los mejores por el PRI son el rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, y el diputado federal Enrique Doger Guerrero. Y los mejores del PAN, José Antonio Gali Fayad, Fernando Manzanilla Prieto y Ana Teresa Aranda Orozco.

Los más conocidos son los priístas Agüera y Doger; los mejor evaluados, el secretario de Infraestructura y el rector de la BUAP; y el más rechazado, el ex presidente municipal de Puebla Enrique Doger Guerrero.

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Simón dice:

“La mejor estructura no garantizará los resultados ni el rendimiento. Pero la estructura equivocada es una garantía de fracaso.”

Peter Drucker (1909-2005) Escritor y consultor austriaco.

* Doger y Agüera los más conocidos; Franco Rodríguez, el menos

* El estudio incluye a funcionarios del gabinete sin militancia panista

* En suma: No están todos los que son, ni son todos los que están

En mi última entrega le anticipaba que el gobierno del estado había mandado a realizar un estudio cualitativo de profundidad para evaluar a un grupo de aspirantes a la presidencia municipal. Hoy le tengo más datos.

En el focus group en cuestión fueron analizados cuatro posibles aspirantes del PAN: Fernando Manzanilla Prieto, José Antonio Gali Fayad, Jorge Fouad Aguilar Chedraui y Francisco Rodríguez Álvarez, y dos del PRI: Enrique Doger Guerrero y Enrique Agüera Ibáñez.

La evaluación arrojó las siguientes conclusiones:

El candidato a diputado federal del PRI por el distrito 6 de Puebla, Enrique Doger, y el rector de la BUAP, Enrique Agüera, son los prospectos a la alcaldía más conocidos, seguidos del secretario general de gobierno del estado, Fernando Manzanilla Prieto.

Doger, sin embargo, es más recordado por su trayectoria como rector de la BUAP que por sus logros como presidente municipal de Puebla. Las únicas obras que la gente mencionó de Doger fueron el paso a desnivel sobre el Boulevard Atlixco y el distribuidor vial del Circuito Juan Pablo II.

El rector Agüera tiene un alto nivel de conocimiento. La gente sabe quién es y lo identifica como un rector de resultados, que ha hecho obras importantes en la BUAP como el Complejo Cultural Universitario y el estadio de Ciudad Universitaria, pero con cola para ser criticado, es decir, se cuestiona su honestidad, pero no su eficiencia y eficacia para hacer cosas y dar resultados.

De los prospectos panistas —aunque formalmente ni siquiera es adherente del PAN— el secretario general de gobierno es el más conocido. La gente lo asocia al gobierno de Rafael Moreno Valle pero no siempre en sentido positivo.

Menos conocido que Fernando Manzanilla, pero con mejores atributos es percibido el secretario de Infraestructura del gobierno del estado, José Antonio Gali, quien tampoco es miembro ni adherente del PAN.  Entre los participantes del grupo de enfoque hubo comentarios favorables a su desempeño como secretario de Obras.

Le sigue en conocimiento el secretario de Salud del estado, Jorge Aguilar Chedraui, quien al igual que sus dos compañeros de gabinete tampoco es militante de Acción Nacional.

El último de los analizados fue el ex presidente del Centro Empresarial de Puebla (Coparmex) y actual dirigente del Consejo Coordinador Empresarial de Puebla, Francisco Rodríguez. De todos los evaluados, Francisco (Franco) Rodríguez fue el menos conocido y el más criticado. Más que por su trayectoria o características personales, por la percepción negativa que hoy tienen los organismos empresariales de la entidad.

Ni son todos los que están, ni están todos los que son

En lo personal, la lista de aspirantes arriba mencionados a la alcaldía de Puebla me parece incompleta.

Para empezar por el hecho de que en ésta no fue incluido un solo militante panista, siendo que los miembros de este partido en la capital, en una elección interna que posiblemente se realice a mediados de febrero del año entrante, nombrarán por mayoría de votos al candidato a suceder a Eduardo Rivera Pérez en el ayuntamiento de Puebla.

¿Por quién preferirían votar los panistas del municipio de Puebla: por un militante suyo como Mario Riestra Piña, Pablo Rodríguez Regordosa y Pablo Montiel Solana o por un funcionario del gobierno de Moreno Valle sin militancia en las filas del blanquiazul?

¿Qué le hace pensar al gobernador Moreno Valle que los panistas optarían por su cuñado Fernando Manzanilla, que fue militante de Convergencia; o por su secretario de Infraestructura José Antonio Gali, padre del perredista José Antonio Gali López, suegro del verde ecologista Elías Abaid Kuri y concuño de Jorge Estefan Chidiac, antes que por un miembro del PAN o de la organización de El Yunque?

¿Si Ana Teresa Aranda no llega al Senado de la República por el estado de Guerrero, qué le impediría buscar la nominación panista a la presidencia municipal de Puebla, aun con la oposición del gobernador Moreno Valle?

¿Por quién se inclinarían los miembros activos del PAN: por una crítica del morenovallismo o por el cuñado del gobernador?

En las huestes del PRI el panorama tampoco está del todo claro, pues mucho dependerá de lo que ocurra en las elecciones del 1 de julio.

Si el PRI gana los cuatro distritos federales de la capital, indudablemente Enrique Doger se consolida como el principal tirador a la alcaldía de Puebla en los comicios locales del año entrante.

Otros que en este escenario también buscarían un boleto para hacerse de la nominación priísta serían Pablo Fernández del Campo Espinosa, candidato a diputado federal por el distrito 12, y Fernando Morales Martínez, diputado federal saliente y actual dirigente estatal del PRI.

Pero si por el contrario el PRI ganara en Puebla la elección presidencial y perdiera la mayoría de los distritos, entre ellos los cuatro de la capital del estado, entonces creo que se abrirían nuevas alternativas y figuras como la del empresario José Chedraui Budib, coordinador de la campaña de financiamiento de Enrique Peña Nieto en Puebla, adquirirían una gran relevancia.

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Si usted está interesado en saber cuáles son y por qué las mejores preparatorias de Puebla entonces no debe dejar de ver el ranking Top15 que por cuarto año consecutivo elabora Consultoría Contracorriente a partir de seis indicadores.

Sólo le adelanto que la del Tec de Monterrey es por segundo año consecutivo la mejor preparatoria particular de Puebla, seguida por la del Instituto D´Amicis y la del Colegio Benavente. En cuanto a preparatorias públicas, las de la BUAP se mantienen a la cabeza comenzando por la Benito Juárez, seguida la Emiliano Zapata y la Enrique Cabrera Barroso.

Los detalles del ranking Top 15 preparatorias los encuentra en este pdf, y a partir de este lunes en un suplemento especial gratuito que se distribuirá en los principales cruceros de la ciudad, en la entrada y salida de las escuelas evaluadas, así como en cafeterías, restaurantes y otros centros comerciales de Puebla.

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Simón dice:

“La mayor parte de los fracasos nos viene por querer adelantar la hora de los éxitos.”

Amado Nervo (1870-1919) Poeta, novelista y ensayista mexicano.

Que el ex gobernador Melquiades Morales Flores fue el artífice que hizo posible distender el conflicto entre la vieja guardia de magistrados, también conocida como nomenclatura del Poder Judicial, y el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas antes de la reelección de David López Muñoz como presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).

Gracias a su mediación —a petición del ex presidente del TSJ, Guillermo Pacheco Pulido—, se lograron varios acuerdos políticos, entre ellos que los magistrados aceptarán las recomendaciones del Poder Ejecutivo, por conducto de la Secretaría General de Gobierno, para el nombramiento, remoción y rotación de jueces.

Otros acuerdos fueron mantener en la congeladora legislativa la iniciativa para crear el Consejo de la Judicatura y dejar para mejores tiempos —por falta de recursos económicos— las jubilaciones en puerta de una decena de magistrados.

De acuerdo con fuentes confiables, Guillermo Pacheco —quien asesora a Melquiades Morales como senador de la República en temas de derecho constitucional— fue el que recurrió al ex gobernador para despresurizar la tensa relación que había entre la nomenclatura de magistrados y algunos funcionarios del gobernador Rafael Moreno Valle.

Los buenos oficios de Melquiades Morales no sólo permitieron la reelección de terciopelo de David López Muñoz por un año más al frente del Poder Judicial sino la creación de una nueva estructura de jueces que ampliarán la influencia del gobernador y los magistrados en la esfera municipal.

Y es que estos nuevos juzgados municipales, cuya manutención estará a cargo de los ayuntamientos, serán propuestos por el gobernador o los alcaldes pero con la aprobación del pleno del Tribunal Superior de Justicia.

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Que a diferencia de lo que antes ocurría cuando el pleno del Tribunal Superior de Justicia tenía que discutir y aprobar el nombramiento y rotación de jueces, ahora estos ajustes sólo se informan a los magistrados en asuntos generales.

Al menos así ocurrió con el cambio de adscripción de la juez penal de Atlixco, Yrina Janet Sierra Jiménez, que fue requerida para reincorporarse a una Sala del TSJ como secretaria de Estudio y Cuenta, para que su lugar fuera ocupado por el juez mixto de Izúcar de Matamoros, Alberto Bagatela Bermúdez.

O con la juez tercero de penal, Idalia Arciniega Arias, que fue enviada a Teziutlán por negarse a atender un caso especial, recomendado por un alto funcionario del gobierno del estado.

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Que existe una orden de aprehensión en contra del ex juez penal de Cholula y antes titular del Juzgado Noveno de lo Civil en Puebla, Enrique Romero Razo, por el delito de tráfico de influencias.

Romero Razo, a quien en el sexenio marinista se le encargaron muchos de los trabajos sucios de ese gobierno, hoy se encuentra prófugo.

Los enterados sostienen que el delito por el cual se le persigue está relacionado con su participación en el juicio por el cual Ricardo Henaine Mezher se hizo del control accionario del equipo Puebla de futbol de primera división, después de que su anterior presidente Francisco Bernat Cid fue encarcelado.

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Que algunos jueces penales de la Sierra Norte han comenzado pedir licencia, tras recibir amenazas del crimen organizado, tal es el caso José Colot Durán, quien estaba a cargo del Juzgado de Xicotepec de Juárez.

En su solicitud de licencia, Colot Duán manifestó tener una imperiosa necesidad de separarse del Juzgado Penal para dedicarse de tiempo completo al litigio.

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Que la librería Gandhi promociona como una de sus novedades un libro del rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, que lleva por título “La disputa por la educación: por el México que queremos”.

Este libro, de editorial Aguilar, recoge según Gandhi las voces de algunos de los principales actores que desde hace mucho años son copartícipes de las mejores causas sociales en el ámbito educativo e intelectual, siempre a favor del progreso individual y colectivo, y también las visiones y críticas de académicos, investigadores, funcionarios públicos y líderes sociales sobre el sistema educativo nacional y la disputa técnica y pedagógica, administrativa y hasta ideológica de quienes buscan conducirlo y controlarlo.

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Que este martes comparecerá ante la LVIII del Congreso del estado el secretario de Educación Pública, Luis Maldonado Venegas, que sin duda es el secretario con mayores tablas y experiencia política y parlamentaria en el gabinete del gobernador Rafael Moreno Valle.

Su comparecencia se efectuará a partir de las 10:00 de la mañana ante el pleno del Congreso local.

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Simón dice:

“Cuatro características corresponden al juez: Escuchar cortésmente, responder sabiamente, ponderar prudentemente y decidir imparcialmente.”

Sócrates (470 AC-399 AC) Filósofo griego.