La revancha dogerista

En la íntima intimidad, el expresidente municipal de Puebla y desde este jueves abierto aspirante del PRI a la gubernatura de la entidad, Enrique Doger Guerrero, ha revelado a sus más cercanos colaboradores su verdadero propósito en la puja por la nominación priísta a Casa Puebla.

 “Si yo no soy el candidato, Zavala tampoco lo será”. Éste y no otro es el objetivo central del exmunícipe capitalino en la contienda interna del PRI.

A estas alturas del proceso, nadie mejor que Enrique Doger sabe que el equipo y la estructura que hoy lo acompañan son insuficientes para hacerse de la candidatura del PRI al gobierno del estado.

De ahí que el expresidente municipal se haya fijado una meta más realista, de cara al proceso interno del PRI: reventar “el Proyecto Z”, lo que significa impedir que Javier López Zavala se convierta en el abanderado del tricolor a la gubernatura de Puebla.

Doger no cuenta con la estructura, ni con los cuadros necesarios que lo lleven a emprender una cruzada entre la militancia priísta, como la que en su momento realizaron Melquiades Morales frente a Manuel Bartlett, y Mario Marín frente a Melquiades Morales, cuando uno quiso imponer a José Luis Flores Hernández y el otro a Germán Sierra Sánchez.

El exalcalde de Puebla está lejos, pero muy lejos, de una hazaña como esa, por lo que su lucha contra Mario Marín y López Zavala no la dará en el PRI, sino en los medios de comunicación y en otros foros donde la imagen del secretario de Desarrollo Social del gobierno del estado no es precisamente la mejor.

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Simón dice:

“Nunca son tan peligrosos los hombres como cuando se vengan de los crímenes que ellos han cometido”.
Sándor Márai (1900-1989). Escritor húngaro.