LA CORTE DE LOS MILAGROS

¿Atacan a Eduardo Rivera Pérez por consigna de Casa Puebla?

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Suman 22 los panistas denunciados por el dirigente del PRI

Fernando Morales deja fuera a otros y levanta sospechosas

Ponen en oferta libro de Josefina Vázquez Mota

La mejor evidencia de que el dirigente estatal del PRI, Fernando Morales Martínez, actuó bajo consigna de Casa Puebla en la acusación que presentó ante la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en contra del alcalde Eduardo Rivera Pérez, acusándolo de desviar recursos públicos y otros delitos electorales, está en la propia denuncia.

En la conferencia de prensa que Fernando Morales ofreció antes de presentar su querella —que la Agencia Especializada en Delitos Electorales registró como AP/PGR/573/2012— y en las posteriores entrevistas que concedió, éste siempre manifestó que su denuncia era contra el presidente municipal de Puebla.

Si bien el dirigente priísta dijo que en aquella reunión sabatina del 19 de mayo participaron, además de los presidentes estatal y municipal del PAN, diputados de este partido y la delegada federal de la Secretaría de Desarrollo Social, Myriam Arabián Couttolenc, lo cierto es que Fernando Morales jamás mencionó que en su denuncia incluyó a otros actores políticos.

Sí, otros actores como los diputados locales Juan Carlos Espina von Roehrich, Ana María Jiménez Ortiz y Rafael von Raesfeld Porras, para quienes solicitó, previa consignación ante el juez de distrito, su aprehensión y detención como responsables de la comisión de delitos electorales.

La denuncia presentada por Fernando Morales el 23 de mayo no sólo es contra el presidente municipal de Puebla y su esposa Liliana Ortiz de Rivera, en su calidad de presidenta del Sistema Municipal DIF; los dirigentes estatal y municipal del PAN, Juan Carlos Mondragón Quintana y Gerardo Maldonado Balvanera; y la delegada de la Sedesol, Myriam Arabián, sino en contra de otros 17 panistas.

Además de los tres legisladores arriba mencionados, la lista de denunciados la integran: Ruth Ramos Barragán, candidata a diputada federal plurinominal; César Eduardo Arrieta García, secretario particular del director del Instituto de la Juventud del Municipio de Puebla; Diana Sofía Osorio Osorno, secretaria particular del secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas; Sonia Osorio Amador, responsable de la Unidad Administrativa de Acceso a la Información del Instituto Municipal de las Mujeres.

Ignacio Kasusky Chavero, director de Promoción e Industrias Precursoras de la Secretaría de Desarrollo Económico y Turismo del municipio de Puebla; Miguel Méndez Gutiérrez, director de Desarrollo Político de la Secretaría de Gobernación; Celia Bonaga Ruiz, directora de Atención Ciudadana; Pablo David Necoechea Porras, integrante del Consejo de la Juventud; María Fernanda Kasusky Chavero, secretaria particular y técnica del coordinador de Comunicación Social.

Alejandro Serrano Lizaola, secretario particular del secretario de Medio Ambiente y Servicios Públicos; Alfonso Othón Bello Pérez, subcontralor de Responsabilidades y Situación Patrimonial de la Contraloría; Miguel Ángel Barrera Márquez, jefe del Departamento de Recursos Humanos de la Subdirección Administrativa del DIF municipal; Alfonso Lardizábal Díaz, director de Estrategia del Instituto Municipal de Planeación; y Jesús Duque Visconti, jefe de Departamento de la Dirección del Centro de Emergencias y Respuesta Inmediata.

Un detalle no menor, pero que también pone al descubierto a Fernando Morales, es que en su denuncia ante la PGR omitió algunos nombres de asistentes a esa reunión partidista que tuvo lugar en el domicilio del empresario Pablo von Raesfeld, y no de su hermano, el diputado local Rafael von Raesfeld, como erróneamente se asentó en el escrito presentado por el dirigente del PRI.

Entre ellos el de Maribel Pérez Vargas, regidora suplente y colaboradora de Javier Lozano Alarcón en su equipo de campaña al Senado de la República.

Su omisión podría parecer involuntaria —considerando que en la reunión participaron 180 personas— si no fuera porque la asistente del regidor Pedro Gutiérrez Varela es la principal sospechosa de haber grabado las intervenciones de Gerardo Maldonado, Ruth Ramos, Juan Carlos Mondragón y Eduardo Rivera aquella mañana del 19 de mayo en la casa marcada con el número cuatro de la Calle De la Torre del fraccionamiento Santa Cruz Guadalupe.

Preguntas al calce:

¿Por qué el dirigente estatal del PRI ocultó a los medios de comunicación todos los nombres incluidos en su denuncia, entre ellos los de tres diputados locales del PAN?

¿Por qué en las entrevistas que Fernando Morales concedió sobre el tema siempre enfocó sus baterías en contra del presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera?

¿Cómo obtuvo los audios de la reunión?

¿Quién se encargó de editarlos y limpiarlos de estática y otros defectos?

¿Fernando Morales tiene los audios completos o sólo los editados?

¿Por qué el nombre de la regidora suplente Maribel Pérez Vargas no se incluyó en la denuncia?

¿Por omisión? ¿Por qué la fuente del dirigente del PRI no la incluyó? ¿O por tratarse de una panista allegada al regidor Pedro Gutiérrez y colaboradora de Javier Lozano en su equipo de campaña?

¿Por qué Fernando Morales nunca crítica al primer panista de la entidad, Rafael Moreno Valle?

¿Será porque no quiere morder la mano que le da de comer, como afirma su contraparte Juan Carlos Mondragón?

Son preguntas, que conste.

 

EN CORTO

Signo de los nuevos tiempos: el libro de Josefina Vázquez Mota “Dios mío, hazme viuda por favor” se puso de oferta en las librerías Samborns ante la caída de la candidata presidencial del PAN en las preferencias electorales. El libro de Panorama Editorial que antes se vendía en 129 pesos ahora se remata en 89.

 

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Este fin de semana rodaron cabezas en uno de los equipos de inteligencia del gobierno del estado. Abraham Sánchez, quien dirigía a los operadores de tierra, fue relevado sin que hasta el momento se conozca quién lo sustituirá.

¿Se conocerán las causas?

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Todo se encuentra listo para la visita del candidato del PRI a la presidencia, Enrique Peña Nieto. Como primer punto, el martes llegará a Izúcar de Matamoros y luego se trasladará a Tepeaca, ya no a Puebla capital como originalmente estaba previsto. La razón es que grupos opositores al PRI, ligados a la izquierda, podrían boicotear con movilizaciones y marchas de protesta la gira del abanderado de la coalición Compromiso por México.

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Simón dice:

“Bueno es que haya ratones, para que no se sepa quién se come el queso.”

Refrán


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