LA CORTE DE LOS MILAGROS

Confirma auditoría “cochinero” en la Secretaría de Salud

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La ASF detectó aviadores, desorden y desvío de recursos 
Con Antonio Marín, las anomalías continúan sin corregirse

Ahora que los diputados locales se reúnan el martes con el secretario de Salud del estado, Antonio Marín y López, para glosar el cuarto informe del gobernador Mario Marín Torres, ojalá indaguen qué pasó con la auditoría realizada en 2008 al Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), y por qué muchas de las anomalías documentadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) aún siguen pendientes de solventación.

La presencia de Antonio Marín ante el pleno de la LVII Legislatura debiera servir para conocer por qué, por ejemplo, la Secretaría de Finanzas no transfiere en tiempo y forma los recursos enviados por la Federación a la Secretaría de Salud; por qué esta última dependencia no invierte en cuentas productivas los recursos del fondo FASSA; quién se beneficia con esos intereses; o por qué ambas dependencias (Finanzas y Salud) solapan la existencia de aviadores, de decenas de comisionados sindicales con goce de sueldos, y de médicos que en realidad laboran para el ISSSTE, el IMSS u otras instituciones privadas.

Supongo que los diputados locales deben saber que a finales del año pasado, la ASF emitió el reporte número 653 denominado “Cédula de Resultados Finales” sobre la auditoría practicada a la Secretaría de Salud de Puebla por recursos ejercidos en el año 2007, y que entre otras cosas reveló lo siguiente:

° La existencia de 58 comisionados sindicales con goce de sueldo, cuyas autorizaciones se emitieron una quincena después de que éstas entraron en vigor, causando un daño de 405 mil pesos.
 
° La presencia de 383 servidores públicos que cuentan con plaza de área médica, pero que en realidad realizan funciones administrativas, y a quienes se generaron 9,406 pagos por un monto de 71 millones de pesos.

° Pagos por 2.8 millones de pesos a 86 personas que ya habían causado baja.

° Pagos de bonos y otras compensaciones sin sustento normativo a 357 funcionarios de mandos superiores por un monto de 13 millones 317 mil pesos.

° La entrega de vales de despensa por 2 millones 381 mil pesos a 953 empleados de la Secretaría de Salud que no tenían derecho a ellos.

° Pagos de más a 1,069 personas bajo el régimen de honorarios por 9 millones 193 mil pesos.

° La existencia de al menos 18 aviadores adscritos a nueve centros de trabajo de la Secretaría de Salud, a quienes se les hicieron pagos de nómina por 3.4 millones de pesos.

° Expedientes de licitaciones y adjudicaciones por compra de uniformes de enfermería, de insumos en general y de insumos para el centro estatal de transfusión sanguínea y de vales de despensas, carentes de propuesta económica y de publicación en el Periódico Oficial del Estado.

Por si los diputados de la LVII Legislatura local ignoraran esta revisión, efectuada a la Secretaría de Finanzas y a la Secretaría de Salud del estado, aquí les doy algunos detalles adicionales, que constan en las páginas 5 y 6 de la Cédula de Resultados Finales, elaborada por Cristián Mauricio Hernández Gerón y supervisada por Narciso Ceballos Montero, ambos de la Auditoría Superior de la Federación:

“De la revisión efectuada a las ministraciones realizadas de la Secretaría de Finanzas del Estado de Puebla a los Servicios de Salud del Estado de Puebla, se observó que el recurso no se radicó en tiempo y forma ya que existe un atraso en la transferencia del recurso de 15,000 miles de pesos” (15 millones de pesos).

“Derivado de la revisión a las cuentas bancarias del FASSA se constató, que el recurso no es invertido en cuentas productivas por lo que no se tienen intereses generados”.

“De la revisión de los estados de cuenta bancarios y de los registros auxiliares, se determinó que se otorgaron préstamos al programa del Seguro Popular y al programa Oportunidades por un monto de 8,647.2 miles de pesos (8 millones 647 mil pesos), los cuales no fueron reintegrados a la cuenta de FASSA”.

“De la revisión efectuada a las plantillas de personal, se determinó que no se elaboran compatibilidades de empleo, por lo que existen cruces de horario con el IMSS e ISSSTE”.

“Se determinó que existen plazas autorizadas sin ser ejercidas, así como plazas ejercidas que no fueron autorizadas”.

“Se otorgó el pago de aguinaldo y vales de despensa a personal contratado por servicios profesionales sin que éstos tuvieran derecho a dichas prestaciones”.

Un par de cuestiones que habría que precisar sobre el reporte, clasificado como reservado, es que éste únicamente se centró en uno de los fondos federales, el FASSA, y que la auditoría sólo abarcó el ejercicio del año 2007.

En otras palabras, los pliegos de observaciones y cargos derivados de esa auditoría corresponden a la gestión de Roberto Morales Flores y no a la de Antonio Marín, la cual, dicho sea de paso, tampoco ha hecho mucho por corregir o subsanar las anomalías halladas en la dependencia, a la que arribó hace ya cinco meses.

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Simón dice:

“No basta saber, se debe también aplicar. No es suficiente querer, se debe también hacer”
Johann Wolfgang Goethe, poeta y dramaturgo alemán.

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Comentarios y críticas a los correos: periodistasoy@hotmail.com y rruiz@e-consulta.com.mx


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