Policía Auxiliar, bomba de tiempo
Por los malos tratos y ofensas al personal, una serie de despidos injustificados, descuentos salariales y de aguinaldo, jornadas de dos y hasta tres turnos, y la suspensión del pago de horas extras, viene incubándose un creciente malestar al interior de la Corporación Auxiliar de Policía de Protección Ciudadana, mejor conocida como la Policía Auxiliar del estado.
La inconformidad se centra en el director administrativo, Fernando González Vázquez, un recomendado de la secretaria de Planeación y Finanzas del estado, María Teresa Castro Corro, quien es el que realmente manda en la corporación.
Los problemas al seno de la Policía Auxiliar son de tal magnitud, por la falta de personal que ha renunciado o ha sido despedido, que el Centro Comercial Angelópolis está por rescindir a esta corporación un contrato anual de más de 10 millones de pesos.
Según el administrador de la plaza, Enrique Valdés Gutiérrez, el servicio que presta la corporación es muy deficiente, debido a que la misma nunca ha podido completar la plantilla de 28 vigilantes para cubrir en tres turnos las 24 horas del día durante los 365 días del año.
En un escrito dirigido al director general de la Policía Auxiliar, Mauricio Saad Viveros, el administrador del Centro Comercial Angelópolis le recuerda: “durante el periodo del 2021 dejaron de facturar $500,000 por la falta de personal, ya que quincena a quincena la plantilla siempre estuvo incompleta”.
Y le advierte que, si esta situación no se corrige y “que deja al descubierto la mala organización administrativa y operativa de la Policía Auxiliar”, buscará otro proveedor para cubrir su necesidad de seguridad.
Los problemas de falta de personal no son nuevos, pero se han agravado desde el arribo de Fernando González a la Dirección Administrativa, ya que éste no solo maltrata a los elementos, tachándolos de mediocres, sino que los hostiga laboralmente obligándolos a doblar turnos, pero sin pagarles horas extras.
En diciembre este funcionario redujo a los policías auxiliares su aguinaldo, quitándoles 5 días, con el pretexto de que así lo había dispuesto el presidente López Obrador.
Otra situación que tiene indignados a los uniformados es el cambio de banco donde se les deposita su salario. Antes la nómina la manejaba Santander, pero Fernando González dispuso volver a trabajar con Banorte, y éste aprovechó el cambio para cobrarse a lo chino créditos o adeudos que varios elementos tenían con la institución bancaria.
Por todo ello es que a nadie debería extrañar si en el transcurso de los próximos días los policías auxiliares salen a la calle a manifestarse o se organizan para suspender actividades en demanda de la destitución del director administrativo, el pago de horas extras y mejores condiciones laborales.
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