¿Quién ganará la elección interna del PAN del próximo domingo: Genoveva o Augusta?
- La primera es favorita, a pesar del rechazo que tiene en amplios sectores de la militancia panista
A una semana de las elecciones internas para renovar la dirigencia estatal del PAN, varias lecturas pueden hacerse.
La primera y más importante es que serán los panistas quienes elijan a su próxima dirigencia, lo que hace mucho tiempo no ocurría, al menos en el estado, debido a que el CEN del PAN en complicidad con los gobernadores Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad habían optado por privilegiar el método del candidato único o la designación directa, bajo el prurito de impulsar una candidatura de unidad.
La última elección interna que se recuerda fue la de Rafael Micalco Méndez, cuando venció a Roberto Grajales Espina y a Héctor Montiel García en 2006, es decir hace 15 años.
Otra cuestión relevante es que se trata de un proceso realmente competitivo, entre dos grupos antagónicos, aunque los dados están cargados hacia la planilla encabezada por Genoveva Huerta Villegas que aspira a reelegirse por tres años más.
Una tercera lectura, a juzgar por el desarrollo de la contienda, la rivalidad de los candidatos y sus grupos de apoyo, y lo que públicamente y en redes sociales se han dicho y hasta insultado, es que el PAN no saldrá fortalecido ni unido de esta controvertida y controversial elección interna.
La fórmula compuesta por Genoveva Huerta y Clemente Gómez Medina se percibe como la favorita por el respaldo y el cobijo que tiene del presidente del CEN, Marko Cortés Mendoza, y de las estructuras del CDE, y los recursos que estas y el exsecretario de Salud de Moreno Valle, Jorge Aguilar Chedraui, han invertido en la promoción de ambos.
Sus debilidades y amenazas se centran en la imposición y venta de candidaturas durante los recientes comicios, lo que le generó rechazo y críticas de amplios sectores de la militancia, ya que en no pocos casos Genoveva Huerta se apostó por priístas y por candidatos comunes que dejaron fuera a los aspirantes del PAN, y en la designación de regidores plurinominales incondicionales de ella, pero que poco o nada aportaron a los candidatos a presidentes municipales.
Otra debilidad que tendría esta planilla en caso de ganar las elecciones del próximo domingo es que no tiene ni tendrá el respaldo de los principales alcaldes miembros del PAN como Eduardo Rivera Pérez, y Edmundo Tlatehui Percino, de Puebla y San Andrés Cholula, respectivamente.
Una amenaza más, y a la cual nos referimos en nuestra anterior entrega, es que el proceso —aun después de las elecciones del próximo domingo 14 de noviembre— sea impugnado ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y éste ordene repetirlo por vicios de origen. https://archivo.e-consulta.com/blogs/corte/?p=17018
De la planilla opositora encabezada por la exregidora Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández y Marcos Castro Martínez puede decirse que su principal fortaleza no radica en su liderazgo y reconocimiento de la militancia, sino en la capacidad que tengan de capitalizar la inconformidad de los panistas lastimados y marginados durante la gestión de Genoveva Huerta y el proceso de selección de candidatos en los pasados comicios.
Tienen la oportunidad de sacar provecho de que los padrones municipales más grandes del PAN en la entidad se localizan en los municipios donde el rechazo a Genoveva es mayor: Puebla capital, Tehuacán, San Martín Texmelucan y las Cholulas.
Sus debilidades se centran en tres aspectos: uno, que Augusta nunca fue la candidata favorita para enfrentar a Genoveva. El primero fue Marcos Castro y cuando se impuso la cuota de género, Ana Teresa Aranda, que es más conocida y combativa que aquella.
Dos, la cerrazón que los opositores han mostrado para abrirse a grupos excluidos por quien busca reelegirse por tres años años, sin importar si son afines o no a Eduardo Rivera o a ciertos liderazgos yunquistas. En este rubro Genoveva Huerta y Clemente Gómez se han mostrado más pragmáticos al sumar a gente que es o fue parte de esta organización o que hasta hace no mucho estaban identificados con Eduardo Rivera, como Pablo Rodríguez Regordosa y su esposa la diputada Mónica Rodríguez de la Vecchia;, el exalcalde Luis Eduardo Paredes Moctezuma, Guillermo Velázquez Gutiérrez, Fernando López Rojas, los hermanos Morales Garduño y Miguel Espinosa de los Monteros Gil, entre otros.
La amenaza contra la fórmula opositora, en caso de ganar, es que su victoria sea impugnada, alegando que ni Augusta Valentina ni Marcos Castro estaban al corriente en el pago de sus cuotas partidistas y que tuvieron el apoyo de dirigentes de estructuras municipales del PAN, lo que está prohibido, y de figuras que ajenas al partido o que incluso contendieron por otros institutos en las elecciones de mediados de este año.
Un factor que será decisivo en la contienda interna por la dirigencia estatal del PAN será la capacidad de movilización que tengan las planillas. La que más pueda acercar militantes a los centros de votación será sin duda la ganadora.
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