Ayer le platicaba que algo podrido se ocultaba en la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de Puebla (Canacope) sobre un precioso subsidio de 25 millones de pesos que el gobierno de Mario Marín Torres entregó en 2010 al presidente saliente de este organismo, Francisco Monterrosas Sosa.

Hoy le tengo más información.

Y es que ya está en curso una investigación para saber a dónde fueron a parar esas “ayudas a instituciones sin fines de lucro”, sólo que ésta no la realiza la Secretaría de la Contraloría, ni la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico, sino el presidente entrante y algunos consejeros de la Canacope.

De acuerdo con las primeras pesquisas, el precioso subsidio sólo sirvió para que el presidente saliente de la Cámara y algunos funcionarios de la extinta Secretaría de Desarrollo Económico se enriquecieran a costa del erario, ya que las convenciones internacionales y ferias locales que supuestamente se realizaron con esos recursos públicos fueron pura faramalla.

Sí, un fraude con recursos públicos que fueron a parar a dos empresas, constituidas el mismo día y con los mismos socios el 4 de marzo de 2010, pero que además —oh casualidad— tienen el mismo domicilio fiscal: la calle 10 Sur 2303.

De los 24.7 millones de pesos que en distintas partidas transfirió el gobierno de Mario Marín a la cuenta de la Canacope, sólo existen facturas por 17 millones emitidas por dos empresas —RARO de México S de RL de CV y Gaga Asesoría Empresarial SC— que por maldita casualidad también tienen a los mismos socios: Rafael García y Mares y Ruth Romina García Hernández.

De los restantes ocho millones de pesos no existe ningún comprobante o factura.

Otro descubrimiento que también ha llamado la atención del presidente de la Canacope,  Bernardo Bojalil Daou, y algunos consejeros interesados en conocer el fin del precioso subsidio de 25 millones de pesos, es la existencia de un oficio que implica a los principales sospechosos del fraude.

En dicho oficio el entonces director administrativo de la Secretaría de Desarrollo Económico, René Heriberto Ruiz Rangel, reconoce haber recibido hojas membretadas en blanco de la Cámara por instrucciones del entonces presidente de ésta, Francisco Monterrosas Sosa, quien hoy no puede explicar a los consejeros y socios de la Canacope para qué se utilizó esta papelería.

 

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Simón dice:

“Cuanto mayor la riqueza, más espesa la suciedad.”

John Kenneth Galbraith (1908-2006) Economista estadounidense.