Enrique Doger, oportunismo electoral
El jueves de hace ocho días, el expresidente municipal de Puebla, Enrique Doger Guerrero, se reunió a comer con los dirigentes estatales del PRD, Convergencia y el PT, en un jardín de Atlixco propiedad del llamado Niño Naranja, José Juan Espinosa Torres.
La reunión fue a petición del propio Doger por conducto del diputado Jorge Alfonso Ruiz Romero, quien también asistió a la comida que concluyó al filo de las 18 horas, minutos después de que el dirigente estatal perredista, Miguel Ángel de la Rosa Esparza, se despidió para ir a presentar su examen de maestría en la Universidad Iberoamericana de Puebla.
Durante el encuentro, el exmunícipe exploró la posibilidad de que los tres dirigentes de la izquierda poblana se aliaran con el PAN en las elecciones locales de julio del próximo año, llevando al senador Rafael Moreno Valle Rosas como candidato a la gubernatura y a él como candidato a la alcaldía de Puebla.
Sin embargo, Doger Guerrero no encontró eco.
Por el contrario, el convergente José Juan Espinosa le dijo que esa posibilidad estaba cancelada, que no había condiciones para una coalición de esa naturaleza, amén de que los partidos del frente Diálogo por la Reconstrucción de México (DIA) no se sumarían al proyecto de Moreno Valle a la gubernatura.
En el mismo tenor se pronunciaron el dirigente del PT, Zeferino Martínez Rodríguez, y el perredista Miguel Ángel de la Rosa, aunque éste último —en una reunión previa con el mismo Enrique Doger— sí abrió esa eventualidad siempre y cuando se establezcan algunos candados, los cuales allí no mencionó.
En cambio, los dirigentes estatales del DIA plantearon a Doger que sí lo apoyarían como candidato, pero a la gubernatura y en una coalición de los tres partidos de izquierda.
Palabras más, palabras menos, le dijeron al expresidente municipal que no querían que los usara para chantajear al PRI ni tampoco como instrumento para que Javier López Zavala perdiera la gubernatura frente al panista Moreno Valle.
Lo que nos interesa es ganar, no hacer perder a Zavala o beneficiar a Moreno Valle, le insistieron al tiempo de explicarle que esa misma posición era la de Manuel Camacho Solís y sus dirigencias nacionales.
Fue entonces que la conversación derivó hacia lo económico. Doger preguntó una y otra vez cuánto dinero le aportarían a la campaña, pues sin recursos económicos las posibilidades de una victoria electoral eran prácticamente nulas.
La respuesta de los dirigentes de Convergencia, PRD y PT no fue de su agrado, pues le dijeron que aunque los tres partidos canalizaran a su campaña la totalidad de los recursos que obtuvieran del Instituto Electoral del Estado y sus dirigencias nacionales, éstos tampoco serían suficientes, por lo que él también tendría que conseguir y aportar dinero si quería ganar.
De más está contar cómo terminó la reunión y cuál fue el ánimo del anfitrión y los convidados al rancho de José Juan Espinosa ubicado en el antiguo camino a Nexatengo, del municipio de Atlixco.
***
Que hace unos días, después de una auditoría a la Coordinación de la Jurisdicción Sanitaria número 4 (San Salvador El Seco) de la Secretaría de Salud del estado, fue despedido el director de Administración, Arturo Mendoza.
El problema es que las anomalías arrojadas por la auditoría también alcanzaron al exjefe de esa jurisdicción, Oscar Antonio de la O, quien había sido reubicado en la número 5, de Huejotzingo.
La investigación comenzó debido a una serie de quejas y denuncias por la pérdida de medicamento y material de curación en las llamadas caravanas de salud, del Programa Oportunidades, y por el desvío de vales de gasolina destinados al parque vehicular de esta jurisdicción sanitaria.
Los detalles de todas las anomalías e irregularidades halladas en la jurisdicción de San Salvador El Seco, que involucran al exjefe de la misma y al exdirector administrativo, los tiene Rebeca Lavalle, del Departamento de Seguimiento Operacional de la Secretaría de Salud.
***
Simón dice:
«Hay que ser infiel, pero nunca desleal».
Gabriel García Márquez (1927) Escritor colombiano.