Para no dejar dudas sobre el regreso de Mario Marín Torres a la política poblana y su influencia en la conducción del PRI, anote el nombre de Joé Hernández Corona como futuro integrante del Comité Directivo Estatal.

El ex director General de Gobierno y ex subsecretario de Asuntos Políticos en el sexenio marinista se perfila para ocupar la Secretaría de Organización, nombramiento que en teoría fue impulsado por el grupo del subsecretario federal de la Sedesol, Juan Carlos Lastiri Quirós.

Y digo que en teoría porque en realidad el promotor de Joé Hernández es el ex gobernador Mario Marín.

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Quien también se perfila para ser miembro de la dirigencia del PRI en la entidad, una vez que la fórmula compuesta por Isabel Allende Cano y Víctor Gabriel Chedraui asuma la presidencia y la secretaría general del Comité Directivo Estatal, es el ex regidor y ex diputado Gerardo Mejía Ramírez.

Gerardo Mejía podría convertirse, con el impulso de la senadora Blanca Alcalá Ruiz y el diputado federal Javier López Zavala, en secretario de Acción Electoral.

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La recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sobre el caso Chalchihuapan no sólo traerá malas noticias al gobernador Rafael Moreno Valle, al procurador del estado Víctor Carrancá Bourget y al secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas.

El resolutivo del ombudsman nacional también será adverso al presidente auxiliar de San Bernardino Chalchihuapan, Jairo Javier Montes Bautista, por haber mentido sobre su participación en el enfrentamiento que el 9 de julio se dio entre policías y pobladores en el kilómetro 14 de la autopista Puebla-Atlixco.

De acuerdo con las investigaciones y evidencias que posee la CNDH, algunas de las cuales fueron entregadas en propia mano a su presidente Raúl Plascencia Villanueva por el senador Javier Lozano Alarcón, el edil auxiliar de Chalchihuapan no sólo estuvo presente durante la reyerta, sino que agredió a policías junto con otros pobladores del lugar.

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No lo cuente en voz alta, pero el titular de la Secretaría General de Gobierno, Luis Maldonado Venegas, ha sido visto y oído en algunos comederos políticos de la Ciudad de México tratando de salvar su prestigio y reputación antes de que le pidan su renuncia o lo obliguen a dejar la dependencia.

Los enterados aseguran que Maldonado ha recurrido a sus viejas amistades y contactos del Distrito Federal, así como las decenas de personalidades que han recibido alguna recomendación o condecoración de la Legión de Honor Nacional de México, la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, y la Academia Nacional de Historia para que lo rescaten y lo saquen de Puebla.

Por cierto. Quien podría reemplazarlo en la Secretaría General de Gobierno es un paisano suyo, que actualmente se desempeña como secretario de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial.

Sí, me refiero a Mario Rincón González, que en lo que va del sexenio morenovallista ha sido subsecretario de Asuntos Políticos y Protección Civil, encargado de despacho de la Secretaría Ejecutiva del Consejo Estatal de Coordinación del Sistema Nacional de Seguridad Pública y secretario de Desarrollo Social, además de candidato y diputado local por el distrito de Amozoc.

Su avanzada en la Secretaría General de Gobierno es Omar Álvarez Arronte.

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Bajo el manto de la poblanidad, el senador y exdirigente nacional de Convergencia Luis Maldonado Venegas proyecta nombrar a destacados miembros de su partido en puestos clave dentro de la próxima administración pública estatal.

El futuro secretario de Educación Pública del estado pretende que la exdiputada federal y excandidata a la alcaldía de Boca del Río, Veracruz, Maricarmen Salvatori Bronca, sea la próxima subsecretaria de Educación Superior, y que el expresidente de Convergencia en Hidalgo, José Octavio Ferrer Burgos, se convierta en el secretario técnico del Consejo de Cultura.

Su argumento es que ambos son poblanos, como si eso fuera alguna garantía.

Lo único cierto es que la exdiputada veracruzana Maricarmen Salvatori, quien ciertamente nació en Puebla, funge hoy como coordinadora nacional de Mujeres Convergentes, y que el tehuacanero José Octavio Ferrer se perfila como secretario técnico del Consejo de Cultura no por sus méritos en el impulso de las artes y la cultura, sino por sus antecedentes partidistas y vínculos con organizaciones liberales y masónicas vinculadas a Luis Maldonado como la Legión de Honor Nacional de México.

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Salvo sorpresas de última hora, la Secretaría de Educación Pública se convertirá en una súper secretaría que absorberá a la Secretaría de Cultura y al Instituto Poblano del Deporte.

La Secretaría de Cultura será degradada a Consejo, como ya se lo había comentado, mediante una reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública para que esta dependencia pase a ser un órgano administrativo desconcentrado de la SEP que ejercerá las atribuciones de promoción y difusión de la cultura y las artes.

La intención original de Luis Maldonado es que el secretario técnico de este Consejo fuera el hijo de un viejo dinosaurio priísta José Octavio Ferrer Guzmán.

Pero ante el rechazo que ha encontrado de intelectuales, escritores y creadores poblanos por la desaparición de la Secretaría de Cultura ha optado por abrir el abanico a otras alternativas más ciudadanas.

En este escenario su terna la integran: el director del Instituto Municipal de Arte y Cultura, Pedro Ocejo Tarno; el poeta, exagregado cultural y exsecretario general de la Universidad de las Américas Puebla, Miguel Pérez Maldonado, y el excoordinador administrativo y actual director de Artes Plásticas de la Secretaría de Cultura, Rafael Durá Durá.

De éstos el que más posibilidades tiene es Pedro Ocejo, sólo que éste no quiere ser secretario técnico de un Consejo Estatal de Cultura, sino secretario del ramo, lo que explica el respaldo que tiene de muchos de los firmantes de la carta pública que exigen la permanencia de la Secretaría de Cultura del estado.

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El ciclista y medallista olímpico José Manuel Youshimatz Sotomayor es el candidato de Luis Maldonado para hacerse cargo del Instituto Poblano del Deporte, que continuará sectorizado a la SEP.

Youshimatz Sotomayor cumple con uno de los requisitos que tanto busca Maldonado para justificar sus nombramientos: es oriundo de la entidad, aunque en Puebla nadie lo conozca.

El medallista olímpico ya tiene experiencia como funcionario deportivo, pues fue director del Instituto del Deporte en Aguascalientes y de la Comisión Nacional del Deporte, de la que por cierto no entregó muy buenas cuentas.

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Los candidatos del senador convergente para dos de las tres subsecretarías de la SEP son: la ya mencionada Maricarmen Salvatori y Andrés García Coca.

A la primera quiere hacerla subsecretaria de Educación Superior, gracias a sus méritos partidistas como coordinadora nacional de Mujeres Convergentes, y al segundo subsecretario de Educación Básica.

García Coca ya fue subsecretario de Planeación de la SEP en el sexenio de Manuel Bartlett Díaz, cargo por el que pasó sin pena ni gloria.

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Simón dice:

«Culto es aquel que sabe dónde encontrar lo que no sabe.»

Georg Simmel (1858-1918) Sociólogo y filósofo alemán.