Está muy bien que el PRI en el Senado demande una investigación sobre el destino de los recursos recaudados en Puebla por el llamado Impuesto Sobre Nómina (ISN) y su administración a cargo de un fideicomiso privado, y que en el Congreso local se busque convertir en causal de juicio político para un gobernador el manejo indebido de fondos o deuda pública.

Ambas iniciativas me parecen excelentes, pero que tendrían que completarse con una investigación hacia sus diputados locales de la LVIII Legislatura que en 2012 aprobaron, sin chistar, reformas a la Ley de Proyectos para la de Prestación de Servicios por las cuales el gobernador Moreno Valle fue autorizado a transferir a un fideicomiso privado los recursos del ISN.

En otras palabras: tan culpable es el que mata la vaca como el que le agarra la pata, y de esas reformas que hoy son fuente de opacidad –y quizás hasta de corrupción– del destino que tienen los recursos del ISN, son tan responsables el gobernador actual y sus diputados de la LVIII Legislatura local como los legisladores del PRI de entonces.

Aquí sus nombres: Edgar Salomón Escorza, Ramón Felipe López Campos, Felipe David Espinoza Rodríguez, Ernesto Leyva Córdova, Eleoformes Palacios Reyes, Jesús Vázquez Viveros, Elvia Suárez Ramírez, José Lauro Sánchez López, Jorge Luis Coriche Avilés, Ricardo Urzúa Rivera, Zenorina González Ortega, Iván Conrado Camacho Moreno, Juan Manuel Jiménez García y Gerardo Mejía Ramírez.

Pues fueron ellos los que avalaron que lo recaudado por el ISN pudiera ser operado durante 50 años por un fideicomiso, administrado por Evercore-Protego, de la que es socio el ex secretario de Hacienda, Pedro Aspe, sin rendir cuentas al Congreso del estado.

Como ya lo documentó la periodista Socorro López Espinosa, estos diputados aprobaron el 19 de marzo de 2012 reformas que permitieron al Ejecutivo estatal, a través de la Secretaría de Finanzas, constituir fideicomisos que administrarán los ingresos derivados de contribuciones, impuestos como el ISN, derechos, productos y aprovechamientos, pero además que éstos fueran desincorporados temporalmente del patrimonio del estado.

Es decir, el gobernador Moreno Valle pidió permiso al Congreso para llevarse a un fideicomiso privado los ingresos del ISN, y los diputados de la LVIII Legislatura, incluidos los priístas, se lo autorizaron aun a sabiendas que estos dejarían de formar parte del patrimonio del estado.

Por eso digo que está bien que el Senado pida al Congreso investigar el destino de lo recaudado por la Secretaría de Finanzas del Impuesto sobre Nómina entre 2012 y 2015 y mejor aún que Pepe Chedraui pida transparentar la aplicación de esos recursos e incluso la posibilidad de llevar a juicio político al gobernador Moreno Valle en caso de que estos se hubieran malversado, pero me parece que la investigación debe ir más a fondo.

No quedarse sólo en el plano mediático.

La investigación debe ampliarse a los diputados de esa Legislatura que de manera irresponsable aprobaron que esos recursos salieran del patrimonio del estado para ser administrados por un fideicomiso privado.

De lo contrario todo quedará en un escándalo, propio de la coyuntura electoral. Y ya basta de eso. El asunto es demasiado serio como para dejarlo ahí. Son 50 años de opacidad que no podemos, ni debemos permitir.

***

Correos: rruiz@e-consulta.com y periodistasoy@hotmail.com

Twitter: @periodistasoy

Facebook: Rodolfo Ruiz http://on.fb.me/1qovSt

Zavala lo apoyó en su campaña por Axochiapan, pero perdió
Impulsan en el PRI nuevo compromiso ante notario público

Hoy le voy a platicar la historia de un adelantado aspirante a la gubernatura de la entidad, que quiso congraciarse con el nuevo arzobispo de la grey católica de Puebla, mediante su hermano, que vive en el estado de Morelos y perdió las elecciones internas del PRI del pasado domingo 8 de marzo, y de todas las suspicacias que ese suceso ha levantado entre la clase política local.

Los personajes en cuestión son el secretario de Desarrollo Social del estado, Javier López Zavala, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa y su hermano Francisco, de los mismos apellidos.

Este último se registró como precandidato del PRI a la presidencia municipal de Axochiapan, Morelos, pero no logró su objetivo pese a la ayuda y los recursos que desde Puebla se le canalizaron por conducto de la Secretaría de Desarrollo Social (SDS), como en su momento lo informó Fermín Alejandro García Hernández en su columna Cuitlatlán de la Jornada de Oriente.

Tres fueron los operadores políticos designados por López Zavala para apoyar la campaña de Francisco Sánchez Espinosa en Axochiapan: Javier Filiberto Guevara González, Héctor Vargas Bello y Felipe David Espinoza Rodríguez.

El primero fue expresidente municipal de Izúcar de Matamoros, y actualmente se desempeña como delegado regional del DIF en la mixteca, mientras que el segundo, que también fue presidente de Izúcar, labora en la SDS, lo mismo que el exdiputado local por Chiautla de Tapia, Felipe David Espinoza, aunque este último como delegado en la región.

Los tres enviados entraron en contacto con el hermano priísta del arzobispo poblano, los tres le dijeron que tenían instrucciones de López Zavala de apoyarlo en su campaña por la presidencia municipal y los tres desaparecieron después del 8 de marzo cuando se supo que aquel había perdido las elecciones internas del PRI.

El hecho, sin embargo, ha despertado toda la clase de suspicacias y lecturas.

Fermín García Hernández se preguntó e interpretó el envío de operadores políticos de López Zavala a Axochipan, Morelos, como un guiño político del adelantado aspirante del PRI a la gubernatura con el mandamás de la Iglesia Católica en Puebla.

Así lo publicó en su columna del pasado 10 de marzo: “Este hecho, más allá de lo anecdótico, plantea una serie de suspicacias, como son las siguientes: Los operadores priistas de Puebla que estuvieron en Axochiapan, ¿fueron parte de la solidaridad que existe entre fuerzas del PRI de distintos estados para ayudarse en proceso electorales? O acaso se trató de ¿un guiño político del PRI o el gobierno del estado a favor de la familia del próximo prelado católico?”

Entre algunos aspirantes del PRI a la gubernatura corre otra versión, según la cual López Zavala no está en el ánimo del nuevo arzobispo, por algunos comentarios y gestiones que éste hizo a favor de la causa del obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, como uno de los posibles sucesores de Rosendo Huesca Pacheco.

En este contexto, la ayuda proporcionada por López Zavala a Francisco Sánchez Espinosa es interpretada más como un gesto de reivindicación y corrección política del secretario de Desarrollo Social para con el nuevo jerarca de la Iglesia Católica en Puebla, que como una muestra de solidaridad partidaria hacia al malogrado aspirante del PRI a la presidencia municipal de Axochiapan, Morelos.

Un detalle que apuntala esta versión fue la ausencia de López Zavala en la comida que el pasado 2 de abril se ofreció en el Seminario Palafoxiano, tras la ceremonia de investidura de Víctor Sánchez.

Su inasistencia cobró notoriedad, no sólo porque él mismo la publicitó en la víspera, sino porque en algunas columnas políticas se dijo que él sería el único de los aspirantes priístas a la gubernatura convidados a tan selecto banquete, algo que además resultó falso.

EN CORTO
A sugerencia del secretario de Desarrollo Social del estado, Javier López Zavala, el presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Alejandro Armenta Mier, evalúa poner a consideración de los 15 candidatos a diputados federales de su partido la firma de un compromiso ante notario público, mediante el cual aceptan que concluirán su gestión de tres años como legisladores y que no buscarán ningún otro cargo de elección popular durante ese periodo.

Se sabe que entre los candidatos a diputados federales que no están muy de acuerdo con esa iniciativa, por el claro mensaje que se quiere enviar a Blanca Alcalá Ruiz, recordándole su compromiso como candidata a la presidencia municipal en 2007, y porque en el fondo pretende coartar sus derechos políticos, para dejar a López Zavala sólo en la carrera por la sucesión gubernamental, figura el exsecretario de Desarrollo Rural del estado, Alberto Jiménez Merino.

Algunos columnistas políticos han mencionado a Jiménez Merino como un posible aspirante a la gubernatura de Puebla de cara al 2010.

***
¿Sabía usted que un hermano del rebelde comisionado de la Comisión para el Acceso a la Información Pública (CAIP) del estado de Puebla, Antonio Juárez Acevedo, labora para el área jurídica del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF)?

Pues si no lo sabía, le digo que se trata de Nicandro Juárez Acevedo, y que éste se desempeña como subdirector de Asistencia Jurídica Social del DIF estatal.

***
El domingo de hace ocho días, en el Lienzo Charro de Xicotepec, el diputado local priísta Carlos Barragán Amador protagonizó un nuevo escándalo, cuando en total estado de ebriedad se puso a insultar y amenazar a René Meza Espejel, hijo mayor del candidato del PAN a diputado federal por el distrito 1 con cabecera en Huauchinango, René Meza Cabrera.

***
Simón dice:

“El problema de nuestra época consiste en que los hombres no quieren ser útiles sino importantes”.
Winston Churchill (1874-1965). Primer ministro británico durante la Segunda Guerra Mundial.

***
Comentarios y críticas a los correos: periodistasoy@hotmail.com y rruiz@e-consulta.com.mx