* Lo envían a controlar, más que a ganar elecciones
* Encabeza un Comité con poco respaldo regional
El arribo de Juan Carlos Mondragón Quintana a la presidencia del Comité Directivo Estatal del PAN es todo un enigma, pues llega con el respaldo de El Yunque a renovar y reestructurar un partido que la misma organización ha controlado y envilecido en Puebla en los últimos años.
Con Mondragón en la dirigencia panista, hay la intención de impulsar una nueva generación de políticos, de hacer del PAN un partido más activo, propositivo y competitivo en la arena electoral, pero también de mantenerlo bajo la órbita ideológica de El Yunque.
El exdirigente nacional juvenil del PAN asume la dirigencia estatal con la consigna de garantizar una contienda interna equitativa entre los distintos aspirantes a la gubernatura, pero a sabiendas de que hoy por hoy la mayoría de los panistas se inclinan por Rafael Moreno Valle Rosas, y de que el senador puede ser el candidato del partido, pero no el dueño del mismo.
De ahí lo complicado de su misión.
En la elección del sábado, a cargo de los miembros del Consejo Estatal, Juan Carlos Mondragón obtuvo 76 votos a favor, 1 en contra, 1 abstención. En la sesión extraordinaria, fue notoria la ausencia de los consejeros afines al senador Ángel Alonso Díaz Caneja, quien desde el 2004 mantiene una rivalidad con El Yunque, organización que antes lo cobijó a él.
Junto con Mondragón, el Consejo Estatal eligió a 30 panistas que formarán parte del nuevo Comité Directivo Estatal y de los cuales saldrán los secretarios general, de organización y de elecciones.
A vuelo de pájaro, el nuevo Comité está dominado por panistas de la capital y aderezado por unas cuantas figuras de Cholula, San Martín Texmelucan y Teziutlán. La escasa o nula presencia de personajes de municipios importantes como Tehuacán y Atlixco y de cabeceras distritales como Huauchinango, Xicotepec, Zacatlán, Zacapoaxtla, Ciudad Serdán, Tepeaca, Tecamachalco, Acatzingo e Izúcar de Matamoros es demasiado evidente.
En estas condiciones, no está de más preguntar: ¿Podrá Juan Carlos Mondragón, un joven licenciado en ciencias políticas y administración, de 31 años de edad, casado, y sin experiencia en la administración, ni en cargos de elección popular, sacar adelante al PAN en las próximas elecciones?
Atisbar un pronóstico resulta difícil.
En lo que sí valdría detenerse, para un análisis más detallado del nuevo dirigente del PAN para el periodo 2009-2012, es en su discurso de toma de posesión, la tarde del sábado en el hotel Holiday Inn del Parque Industrial Finsa.
La intervención del sucesor de Rafael Micalco Méndez podría dividirse en tres partes: su mensaje ideológico, su compromiso ante la militancia y los candidatos del PAN, y su crítica al gobierno del estado y el Instituto Electoral del Estado
En el terreno ideológico, planteó lo siguiente:
«Pienso que la clave de nuestro actuar por Puebla radica en volver a esos, nuestros orígenes. No tengo la menor duda de que la situación que presenta nuestra entidad es similar a la enfrentada por Gómez Morin hacia los inicios del siglo pasado: nuestra generación, una generación fundacional, ha atestiguado el final del viejo régimen en el año 2000 y experimenta el nacimiento y desarrollo de uno nuevo.
«… la solución no está en ganar elecciones por ganarlas, sino en transformar las almas de quienes desean un país más justo y ordenado; en compartir con más hombres y mujeres la ambición por evitar el dolor evitable; en ser verdadera escuela de ciudadanía. El auténtico triunfo de Acción Nacional radica en continuar logrando nuestra victoria cultural.
«El destino nos ha puesto aquí. Nos ha llamado a esta importante cita. No para mirar de manera pasiva la caída de la silla carcomida del priismo local, sino para poner el talento de hombres y mujeres de bien al servicio de Puebla. En Acción Nacional nunca hemos creído en la destrucción o en la obstrucción por consigna, sino en la búsqueda de lo que más conviene a México y en ofrecer lo mejor de nosotros mismos a los demás. Estamos aquí porque nos interesa cambiar a esa silla carcomida por una que sea resistente, robusta, capaz de salir al encuentro de los nuevos tiempos de modernidad y de progreso que han llegado a nuestro país y que indefectiblemente tendrán que hacer su arribo a Puebla».
A los miembros y candidatos del PAN, Juan Carlos Mondragón les ofreció:
«Voy a poner toda mi capacidad al servicio de la unidad del partido. Y esto implica que no permitiré que nadie desde el Comité Directivo Estatal favorezca o desaliente las aspiraciones de quienes legítimamente buscan servir a los poblanos. Pero también buscaré por todos los medios estatutarios poner orden en la casa para que todas las diferencias que sean ventiladas de manera externa sean sancionadas. No me asustan las diferencias; al contrario, estoy convencido de que enriquecen la discusión y el debate sobre lo que más conviene a México, porque no somos de los que censuramos a quienes piensan distinto. Lamentablemente, cuando las discrepancias son hechas públicas y divulgadas en los medios de comunicación, la impresión que damos a la sociedad es que no sabemos ni siquiera gobernarnos a nosotros mismos. Habrá canales internos para que estas diferencias se solucionen, y sólo serán esos canales los adecuados para solventarlas.
«… promoveré la utilización de encuestas para conocer el posicionamiento de nuestros candidatos entre la sociedad, para que quienes nos ofrezcan más posibilidades de triunfo, reciban la confianza de la militancia. También promoveré que aquellos que aspiren a un cargo público, desde los candidatos a una regiduría, a una diputación local, a una presidencia municipal y hasta a la gubernatura, se preparen y acrediten que cuentan con el conocimiento y la vivencia suficiente de nuestra doctrina, de los problemas de la entidad y de los conocimientos técnicos necesarios para una misión tan alta como ésta.
«Lo digo rotundamente: me cercioraré de que Acción Nacional postule candidatos cuya conducta concuerde con nuestra visión del servicio público. Queremos ganar sin perder nuestra identidad; no estamos dispuestos a ganar a cualquier precio«.
Su discurso terminó con una crítica al gobierno de Mario Marín y a las autoridades del Instituto Electoral del Estado, en los siguientes términos:
«… los hechos demuestran que la viabilidad de Puebla como entidad federativa está en riesgo y que nuestras autoridades se burlan descarada e irresponsablemente de la sociedad. Los hechos manifiestan que la continuidad en el poder es un riesgo para Puebla.
«Si bien somos una de las entidades federativas que cuenta con más recursos en su presupuesto –del orden de 40 mil millones de pesos aproximadamente, nuestro estado es de aquellos en los que la pobreza crece y la calidad de la educación se deteriora día a día. Somos la cuarta entidad más corrupta, apenas por debajo del Distrito Federal, Estado de México y Guerrero. Somos el cuarto estado con menor esperanza de vida al nacer, el vigésimo tercero en el índice del PIB per cápita, el vigésimo noveno en el índice de salud, el vigésimo séptimo en materia educativa y el vigésimo sexto con menor desarrollo humano en todo el país. A pesar de que somos la quinta entidad más poblada de México (después del Estado de México, el Distrito Federal, Veracruz y Jalisco), en términos de competitividad estatal ocupamos el lugar 18, por debajo de Baja California Sur, Colima, Campeche, Morelos, Yucatán o Quintana Roo y apenas encima de Tlaxcala o Zacatecas.
«… en Puebla las elecciones de Estado siguen siendo una realidad. Desde la utilización del patrimonio público para la promoción personal de los futuros candidatos, hasta la manipulación de los programas de pobreza para el posicionamiento del partido oficial, vemos un órgano electoral que ni los oye ni los ve, utilizando el pobre argumento de la existencia de supuestas lagunas legales. Mientras que la pobreza aumenta, el nivel educativo desciende y las obras públicas se quedan inconclusas, los secretarios del gobierno estatal se placean cuales vedettes en pasarela. Exijo, a nombre de los ciudadanos, que el Presidente del Instituto Electoral del Estado asuma a plenitud la responsabilidad que le fue depositada por la sociedad, para que vele por la equidad e igualdad de condiciones del proceso electoral del año próximo».
De lo dicho por el nuevo dirigente estatal del PAN, me quedo con esta frase, que en mi opinión resume en buena medida la misión de su nuevo encargo: «Queremos ganar sin perder nuestra identidad; no estamos dispuestos a ganar a cualquier precio».
EN CORTO
Tómelo con reserva, pero una fuente regularmente informada me cuenta que el secretario de Finanzas y Administración mandó a realizar un estudio de opinión con la empresa Parametría, para medir su posicionamiento en la capital del estado como aspirante a la presidencia municipal, y que el resultado de éste lo dejó muy desanimado.
Y es que de acuerdo con la encuesta de Francisco Abundis Luna, Gerardo Pérez Salazar no sólo tiene un bajo nivel de conocimiento sino un potencial de voto muy, pero muy pobre.
***
El secretario de Gobernación, Mario Montero Serrano, parece estar curado totalmente de espanto por el escándalo Marín-Cacho, a juzgar por la reunión que hace un par de semanas tuvo en el Club de Empresarios con Kamel Nacif Borge y Luis Ángel Casas Arellano.
***
Un muy mal rato le hizo pasar el diputado local priísta Carlos Barragán Amador al delegado de la Secretaría de Gobernación de Xicotepec, Iván Santos Valderrábano, a mediados de la semana pasada, cuando éste fue enviado como mediador de un conflicto por la construcción de una carretera que va de la cabecera al municipio de Tlacuilotepec.
En plena reunión con vecinos de la comunidad de San Agustín, Carlos Barragán desconoció a Iván Santos como representante de la Secretaría de Gobernación, lo que provocó que los inconformes con la obra carretera le pidieran que se identificara, lo que éste jamás pudo hacer por no llevar su credencial, ni un documento oficial que lo acreditara con ese carácter.
Ante tal situación, los vecinos de San Agustín lo echaron de la reunión, en medio de los lamentos de Iván Santos que una y otra vez repetía: «Por Dios santito que soy el delegado de Gobernación».
***
Simón dice:
«El verdadero misterio del mundo es lo visible, no lo invisible».
Oscar Wilde (1854-1900). Dramaturgo y novelista irlandés.